Dos mandos de Xbox sobre un fondo oscuro e iconos de videojuegos en la nube

¿Cuáles son las ventajas y desventajas de los videojuegos en la nube?

Icono de un servidor en la nube

Los videojuegos en la nube o en streaming son aquellos que se juegan en línea a través de un servidor remoto en un centro de datos. Los videojuegos en la nube también se conocen como videojuegos a la carta o videojuegos como servicio y se basan en la idea de acceder a los juegos más nuevos disponibles en una gran variedad de dispositivos: siempre que tengas una buena conexión a Internet y compres la suscripción del proveedor de videojuegos en la nube.

Los videojuegos en la nube han existido desde finales de 2000 y han tenido problemas para competir con los juegos basados en equipos y consolas físicos. Pero con los nuevos avances tecnológicos y el aumento de la velocidad de Internet, este modelo ha resurgido en los últimos años y ahora está renovando sus aspiraciones como servicio.

Los servicios de videojuegos en la nube suelen ofrecer una aplicación o un navegador web para jugar en streaming una vez que te hayas suscrito. Podrás jugar con el mando que prefieras (la mayoría son compatibles a través de Bluetooth) e incluso usar la pantalla táctil de tu teléfono con algunos proveedores.

Hay varios proveedores que se han hecho un hueco recientemente en el mercado. Nvidia® presentó GeForce NOW en 2015. Ahora es una de las opciones más populares con más de 500 juegos que se pueden jugar al instante y más de 14 millones de suscriptores (aunque muchos de estos tienen cuentas gratuitas).

Icono de Stadia

Stadia™{{Footnote.A66396}} es la apuesta de Google para convertirse en el fenómeno de los videojuegos en la nube. Sin necesidad de ningún sistema operativo, se puede acceder a este servicio en varios formatos, desde dispositivos Chromecast Ultra™ y Android™ TV hasta tabletas y PC con Chrome OS™ con el navegador Google Chrome™, así como teléfonos Android compatibles con la aplicación móvil Stadia™. Después de someterse a una reestructuración en respuesta a las críticas a raíz de su lanzamiento en 2019, consiguió 2 millones de suscriptores. Los fabricantes de consolas también han tratado de sacar tajada del pastel.

PlayStation™ Now, la plataforma de videojuegos en la nube de Sony, cuenta con la función de compatibilidad para poder jugar a videojuegos nuevos y antiguos hasta la PS2. Es anterior a GeForce NOW, ya que se lanzó en 2014. Después de algunos problemas al principio, llegó a la cifra de 3,2 millones de suscriptores con acceso a sus servicios de videojuegos en la nube para juegos de PS2™, PS3™ y PS4™, así como a la opción de descargar juegos de PS2 y PS4. En total, hay 800 juegos disponibles para jugar en streaming y 300 se pueden descargar.

Xbox® Cloud Gaming, lanzado en 2019, es la respuesta de Microsoft a PlayStation Now, una característica de Xbox® Game Pass. Con Xbox Cloud Gaming es posible jugar en una amplia variedad de dispositivos, incluidos dispositivos móviles. Su biblioteca incluye más de 270 juegos, con retrocompatibilidad con la biblioteca anterior de títulos de Xbox®. Xbox® Game Pass atesora la increíble cantidad de 25 millones de suscriptores, lo que lo convierte en el modelo comercial que muchos servicios persiguen imitar.

Hay muchos otros servicios de videojuegos en la nube disponibles que no hemos mencionado. Aunque hay un proveedor que se adapta a las necesidades de cada jugador, tú, como usuario, eres el que eliges según tus preferencias.

Hay una serie de aspectos positivos y negativos que podrían hacer cambiar de opinión a un usuario a la hora de elegir entre un equipo informático o un proveedor de videojuegos en la nube.

Como ventaja de este último, no se necesitan especificaciones con requisitos altos o bajos para jugar de este modo. El servidor en la nube permite a los usuarios jugar en cualquier dispositivo y cuando quieran según las condiciones del proveedor. Mientras haya activa una conexión de banda ancha continua que se comunique con el servidor, podrás conectarte desde cualquier parte del mundo. Si tenemos en cuenta esto, para jugar en streaming a través de un servidor externo serían necesarios más datos en comparación con la opción de descarga en los sistemas estándar. Por ello, si no tienes una conexión con muy buena velocidad de banda ancha, es posible que te surjan problemas con este método.

Las suscripciones para jugar en la nube tienen sus ventajas. Una vez adquirida una, se te presenta un extenso catálogo de videojuegos para elegir. Muchos jugadores aprecian esta libertad de elegir lo que se quiera, aunque otros se lo pensarían dos veces antes de pagar por una banda ancha de calidad y asumir los costes de una suscripción.

La compresión de vídeo tiene un papel importante en las razones por las que la mayoría de las personas se inclinarían por un equipo o consola de videojuegos en lugar de jugar en la nube. Al igual que en YouTube y otros proveedores de streaming, los vídeos se comprimen para ocupar menos ancho de banda. Esto hace que la resolución de la imagen no sea tan alta en comparación con la de un disco o al descargar el juego directamente.

En este momento, los videojuegos en la nube se encuentran en un período de transición. Todavía no ha eclipsado el modelo tradicional donde los videojuegos se compran y se juegan en casa. Sin embargo, hay servicios, como el exitoso Xbox Game Pass, con su servicio Xbox Cloud Gaming, que están sirviendo para normalizar una nueva forma de jugar. Las limitaciones técnicas del servicio ponen de manifiesto que, en algunas zonas del mundo, la inviabilidad de los videojuegos en la nube en muchos de los títulos AAA del mercado muy demandados y de alta calidad, aunque sería un error descartarlo por completo. La tecnología no para de evolucionar, por lo que en algún momento el tipo de ancho de banda estándar podrá terminar adaptándose mejor a esta forma de jugar. La velocidad y los gráficos que aportan los equipos físicos en los videojuegos suponen un argumento sólido al elegir entre los sistemas de hardware o los videojuegos en la nube.

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